ESOPO.
Una mosca sentada en el árbol de una carreta, se dirigió a la mula que la jalaba, diciéndole,
--¡Qué lenta que es usted! ¿Por qué no va más rápido? A ver si no la pincho en su cuello con mi picadura.
--La mula de transporte contestó,
--No me interesan sus amenazas; sólo pongo atención al que se sienta más arriba de donde está usted, y es quién acelera mi paso con su fusta, o me contiene con las riendas. Váyase lejos, por lo tanto, con su insolencia, ya que sé bien cuando debo ir rápida, y cuando debo ir lenta.
Una mosca sentada en el árbol de una carreta, se dirigió a la mula que la jalaba, diciéndole,
--¡Qué lenta que es usted! ¿Por qué no va más rápido? A ver si no la pincho en su cuello con mi picadura.
--La mula de transporte contestó,
--No me interesan sus amenazas; sólo pongo atención al que se sienta más arriba de donde está usted, y es quién acelera mi paso con su fusta, o me contiene con las riendas. Váyase lejos, por lo tanto, con su insolencia, ya que sé bien cuando debo ir rápida, y cuando debo ir lenta.